Mi amor,
tengo que decirte
que no eres mio,
ni de nadie.
Tu eres tu propio dueño,
aunque a veces,
en mis brazos,
me perteneces,
solo un rato.
Te perteneces solo a ti mismo
Ese es tu destino,
como el de todas las personas.
Yo simplemente soy un ser humano más,
uno entre la gran multitud,
que te mira,
enamorada,
Me siento esclavizada,
por esta dura vida,
que no poseemos nunca
ni la tuya ni la mía,
pero aún así hacemos lo posible
por compartir, siempre
juntos cada día.
¿Sabes a que huele
el perfume mi alma?
No te creas que a cualquier cosa,
Huele a ti, pequeña rosa.
Como eres una flor,
y toda flor necesita cuidados
voy a cuidarte mucho
ayudarte a cultivar sus sueños,
anelos y ambiciones,
por que como flor que eres,
eres frágil y sensible.
Florecilla, que reina
en el alma mia.
Fuente: Poemas de amor
No hay comentarios:
Publicar un comentario