Son las nubes blancas,
como un reflejo de tu belleza.
Tan blanca, ténue y compleja
que sin respiración,
a mi boca deja.
Tu pelo, un río de oro,
es como un campo de trigo,
tan lleno de vida,
tan natural,
Bajo la luz del sol,
no hay nada igual.
Tu boca, rosada
es un campo de fresas
tan jugosas
tan rojas y dulces,
tan perfectas.
¡Florecientes!
No puedo evitar querer
besarte a todas horas,
y es que no hay nada mas rico
que mirarlos bien fijo.
Tus ojos, la profundidad del mar,
tan azules, tan acuosos,
intrigantes,
Conseguirán que naufraguen
más de mil navegantes.
Tu piel, es de pétalos de rosa,
Tan suaves, tan delicados,
por los ángeles están perfumados.
No hay nada que me guste más
que dejarme envolver
entre mil pétalos de rosa,
junto a ti.
Y finalmente,
toda tu,
inigualable,
tan loable,
no me queda
más remedio
que amarte
locamente
y abandonar
mi mente
a tu asedio
No hay comentarios:
Publicar un comentario